Hubo un preámbulo, leído por Ricardo de la Rosa, del recientemente nombrado Director del Instituto Cervantes en Roma, Sergi Rodríguez.
Entre el público hubo ausencias, pero las personas que estuvieron acabaron de completar un cuadro cálido y familiar. Gracias a todos y en especial a Neus que vino desde Mataró sólo para estar con nosotros.
La lectura de Silvia García no defraudó. Dió un sentido especial a la lectura de sus cuentos y definió perfectamente la sala de estar en que nos situó. Nos alegró, nos divirtió, nos creo alguna congoja ... Nos quedamos con ganas. Espero que, a pesar de la distancia, podamos continuar.
Y Mercedes acabó poniendo la guinda a la velada con dos regalos musicales que impresionaron a los que no la habían oído cantar antes. Creo que a partir de ese momento seguidores suyos.
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